Se les denomina también Ángel de la Guarda, Ángel Protector, Ángel de la Presencia. Lo cierto es que mientras los Arcángeles reinan sobre toda la humanidad, los Ángeles Custodios se unen a cada individuo, desde el momento en que salimos del seno de Dios como espíritu y están a nuestro lado en todos los instantes de nuestro devenir.
Su energía nos recubre protegiendo y defendiendo nuestras almas, están siempre con nosotros, vigilantes de nuestra evolución espiritual, observadores de nuestras dificultades y solícitos ayudantes que alivian los dolores; fungiendo como profesores, maestros y compañeros amorosos.
La gran mayoría de las veces no los escuchamos y tenemos la marcada tendencia a hacer justo lo contrario de lo que nos sugieren, cuando no es que cuestionamos su existencia. Sin embargo, su Amor permanece intacto y a la espera de nuestro llamado, cumpliendo con la función que Dios les ha designado ya sea que creamos en ellos o no, deseosos de poder intervenir a favor de su protegido y de acoger sus peticiones, pero su acción se verá siempre desvalorizada si no consigue entrar en comunión con la persona que le ha sido confiada.
Los Ángeles Custodios son seres que se encuentra en evolución en mundos diferentes al nuestro, para llegar a su desarrollo tuvieron que aprender a guiarnos, no es un trabajo improvisado. Cada uno de ellos puede haber estado con un alma concreta durante muchas vidas, ayudando al individuo a reunir las lecciones de cada vida hasta que finalmente recuerda que es Uno con Dios.
Disfrutan junto con nosotros de las actividades que realizamos que nos ocasionen bienestar espiritual, ya sea de una actividad espiritual como de un juego de pelota. Su ayuda esta disponible al momento que nos abrimos a aceptar su presencia Divina. Abrirnos a Ellos, recibirlos con alegría, agradecer de corazón su presencia y permitir que nos acompañen es una forma de acceder a un bienestar que sólo, con el Amor y seguridad que ellos transmiten, podemos alcanzar.
Su energía nos recubre protegiendo y defendiendo nuestras almas, están siempre con nosotros, vigilantes de nuestra evolución espiritual, observadores de nuestras dificultades y solícitos ayudantes que alivian los dolores; fungiendo como profesores, maestros y compañeros amorosos.
La gran mayoría de las veces no los escuchamos y tenemos la marcada tendencia a hacer justo lo contrario de lo que nos sugieren, cuando no es que cuestionamos su existencia. Sin embargo, su Amor permanece intacto y a la espera de nuestro llamado, cumpliendo con la función que Dios les ha designado ya sea que creamos en ellos o no, deseosos de poder intervenir a favor de su protegido y de acoger sus peticiones, pero su acción se verá siempre desvalorizada si no consigue entrar en comunión con la persona que le ha sido confiada.
Los Ángeles Custodios son seres que se encuentra en evolución en mundos diferentes al nuestro, para llegar a su desarrollo tuvieron que aprender a guiarnos, no es un trabajo improvisado. Cada uno de ellos puede haber estado con un alma concreta durante muchas vidas, ayudando al individuo a reunir las lecciones de cada vida hasta que finalmente recuerda que es Uno con Dios.
Disfrutan junto con nosotros de las actividades que realizamos que nos ocasionen bienestar espiritual, ya sea de una actividad espiritual como de un juego de pelota. Su ayuda esta disponible al momento que nos abrimos a aceptar su presencia Divina. Abrirnos a Ellos, recibirlos con alegría, agradecer de corazón su presencia y permitir que nos acompañen es una forma de acceder a un bienestar que sólo, con el Amor y seguridad que ellos transmiten, podemos alcanzar.
1 comentario:
Qué hermoso Blog tienes, lleno de sensibilidad por cada rincón..
de tan lejos has llegado a mi Jardín y te has quedado, te doy la bienvenida, deseo disfrutes, y volveremos a reencontrarnos,
gracias!
abrazo
eljardindemiduende
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